19/2/09

Miguel Anxo e Giorgio Vasari

Xa vos teño falado da importancia de Giorgio Vasari como primeiro gran biógrafo e historiador da arte. Mirade, a continuación, as primeiras liñas que lle adica a Miguel Anxo. Son todo unha declaración de admiración.

"Mientras que los espíritus industriosos y egregios se esforzaban con la luz, del celebérrimo Giotto y sus seguidores por dar al mundo la prueba del valor que la benignidad de las estrellas y la mezcla proporcionada de humores había concedido a sus ingenios y, deseosos de imitar con la excelencia del arte la grandeza de la Naturaleza, para alcanzar todo lo posible esa suma sabiduría que muchos llaman inteligencia, universalmente, se esforzaban en vano, el muy benigno Rector del Cielo volvió los ojos con clemencia a la tierra, y al ver la vana infinidad de tantos esfuerzos, los muy ardientes estudios sin fruto alguno y la opinión presuntuosa de los hombre, más alejada de la realidad que las tinieblas de la luz, para resarcirnos de tantos errores se dispuso a mandar a la tierra un espíritu que universalmente en cada una de las artes y en todas las profesiones mostrase habilidad, que obrando por sí solo mostrase la complejidad de la ciencia de las líneas, la pintura, el juicio de la escultura y las invenciones de la verdaderamente agraciada arquitectura. Y, aparte de esto, quiso acompañarlo de la auténtica filosofía moral, del ornamento de la dulce poesía, para que el mundo lo eligiese y admirase con su más singular espejo en la vida, en las obras, en la santidad de las costumbres y en todas las acciones humanas, y que entre nosotros lo tuviéramos más por algo celeste que terreno. Y como vio que en tales ejercicios y en esas singulaes artes, es decir, en la pintura, en la escultura y en la arquitectura, los ingenios toscanos siempre han sido más elevados y grandes, más observantes de los esfuerzos y los estudios de todas las facultades que los del restos de Italia, quiso darle por patria Florencia, dignísima entre las otras ciudades, para colmar finalmente en ella, como se merece, la perfección de todas las virtudes, por medio de un hijo suyo, y después de haber mostrado ya su gran y maravilloso origen con Cimabue, Giotto, Donatello, Filippo Brunelleschi y Leonardo da Vinci, no se podía sino creer que con el tiempo tendría que revelarse un ingenio capaz de mostrarnos perfectamente (gracias a su bondad) la infinita perfección del final.

Así, en Florencia, en el año de 1474, le nació un hijo a Ludovico Simón Buonarroti, al que bautizó con el nombre de Miguel Ángel…

Giorgio Vasari. Las vidas de los más excelentes arquitectcos, pintores y escultores italianos desde Cimabue a nuestros tiempos (Antología). Madrid, Tecnos, 2001, pp. 367-368.

Retrato de Miguel Anxo vía Wikipedia.

2 comentarios:

Duncan de Gross dijo...

...Ese "librito" de Vasari, es una de mis faltas en la estanteria, tendré que solucionarlo este fin de semana... Saludos!!!

Antonio Martínez dijo...

Hay varias ediciones, alguna de ellas casi de lujo, pero es uno de los "imprescindibles"